El desarrollo de la publicidad en España tiene un poco menos de recorrido que en el resto de los países vecinos de Europa, aunque cierto avatares que le han ocurrido no lo han hecho menos válido ni de menor importancia. Ya durante el siglo pasado, y aún a finales del siglo XIX, la publicidad era activa en nuestro país aunque no lo tomáramos como tal; los folletines, que se consideran los primeros pasos del periodismo en España, también se convirtieron en el primer ejemplo de publicidad, y así se demostró cuando la actividad periodísticas se desarrolló completamente por toda nuestra geografía.
Durante los primeros años del siglo XX, y sobre todo en lo que se refiere al periodo de entreguerras, que sumergió a Europa y al mundo en toda clase de conflictos bélicos, la publicidad en España topó con los problemas políticos: fin de la monarquía, principios de la República, la Guerra Civil y el comienzo de la dictadura. Al final de todo este proceso, la actividad publicitaria era eminentemente propagandísticas, y como la economía de consumo todavía no se había instaurado en el país pues aún tiraba de la pobreza generada por la contienda, no es que se echara a faltar ni mucho menos. No fue hasta la recuperación económica que empezó a gozar Europa y que influyó también en España, que el consumo empezó a mejorar; y ahí fue cuando la publicidad española empezó su ascenso.
A estas alturas, Estados Unidos ya había desarrollado y revolucionado casi su actividad publicitaria, y en cuanto España abrió un pocos sus fronteras al continente, empezó a recibir el impacto de esto, pues a su vez los europeos ya habían sido influenciados por Norteamérica. Podemos decir que en poco tiempo nos subimos al carro, y que nuestra publicidad siguió el ritmo medio de todos los países desarrollados.
En nuevo reto llegó cuando el mundo publicitario conoció otros medios, y se vio apoyado por las nuevas tecnologías que, claro está, no llegó a todos los países al mismo tiempo. Sin embargo, a pesar de haber sufrido un retroceso, también agudizado por la época de crisis económica que también afectó al sector de la publicidad, parece que en los últimos tiempos hemos vuelto a arrancar el vuelo. ¿Y por qué no sería así? Mantenemos el talento, cada vez nos hacemos con mejores y mayores marcas, y los medios para hacer publicidad, nuevos o antiguos, no son ningún misterio para nuestros publicistas actuales, que trabajan con las mejores herramientas. Así que, a partir de ahora, sólo nos queda subir.